Aprendemos jugando, aprendemos mientras nos divertimos, y como buena amante de los videojuegos creo que estos pueden hacer mucho bien para nuestras criaturas en ese sentido.
Nos encanta ir al mercado dominical de San Antonio en Barcelona, es uno de los pocos recuerdos que tengo de hacer cosas con mi familia de pequeña, que me llevaran a cambiar cromos. Alrededor del mercado de los domingos, desde hace más de 20 años generaciones de aficionados al coleccionismo se juntan para intercambiar cromos en las calles. Me apasiona ver varias generaciones, cromos de la liga, de animales de series japonesas, de sus dibujos animados favoritos, de videojuegos. Y un poco más abajo los amantes del Magic tienen su propia esquina.
A V le encantan sus cromos de Frozen y de Peppa Pig. Abrir los sobres, mirar los personajes que salen, llevarse a dormir con ella sus favoritos. Supongo que hace que seamos coleccionistas en casa, que haya visto las cartas de Harry Potter, las de World of Warcraft, y que sea algo que hacemos en familia que nos guste tanto como a ella descubrir que nos ha tocado, y que aprendamos juntas a pegar en un album y a decir los nombres de todos los personajes. Desde antes de cumplir los dos años ya era una de sus actividades de tardes en casa.
Creo mucho en las iniciativas de micromecenaje, y si además son juegos educativos, con ese punto de coleccionismo, de cartas, además creados y pensados por educadores, padres, madres y profesionales pensados para estimular y divertir a las criaturas, me tienen ganada.
Así es Wikiduca «La Leyenda». Que buscan financición y apoyo para que grandes editoriales publiquen su proyecto y distribuir su Trading Card Game para niños y niñas.
Un juego de cartas, pensado para niños y niñas de entre 6 y 12 años, que estimulará su memoria, le ayudará en la toma de decisiones, aprenderá sobre gestión de recursos, mientras descubrirá personajes, histórias y un mundo de fantasia lleno de valores como el esfuerzo o la superación personal. Si quieres conocerlo más a fondo puedes verlo aquí.
Y mientras está en marcha su recien lanzada campaña de crowdfounding tienen a un precio genial para mecenas varias recompensas y que las criaturas puedan empezar su colección.
Les deseamos lo mejor y esperamos verles muy pronto en todos los quioscos, o quien sabe, si acabarán entre las calles del mercado de San Antonio con los niños y niñas cambiandolos juntos con sus pokemos, invizimals, digimones o gormitis!
me pasaré a mirarlo.. mi hijo me empieza a volver loca con todas estas cosas y si se les puede dar una ayudita… aunque sea pequeña… ;)