Comer en familia en Barcelona ¡Visitamos Vapiano!

Una de las cosas que mas disfruto de la ciudad es la de opciones para comer fuera que hay, desde lugares fantásticos con espacios familiares tipo ludoteca, a otros como el Vapiano dónde a los peques les va a fascinar ver como preparan la comida delante suyo. Si además cuentan con un espacio amplio y un trato estupendo hacia ellos y hacia las familias son una elección perfecta.

El tener un bebé de alta demanda que no puede estar sentada en una trona más de unos minutos te hace elegir con mucho cuidado los lugares a los que vamos, por nuestra propia comodidad y por los de la gente alrededor.

Lo primero que nos encanta de Vapiano es su gran espacio, separación entre mesas y el ambiente familiar que se respira.

 

¿Donde está Vapiano Barcelona?

En el centro comercial de Diagonal Mar, una zona estupenda para ir con peques, muy cerca de la playa,  y con buena combinación de metros y buses.

Centro Comercial Diagonal Mar
Avenida Diagonal número 3, tienda 22

¿Qué se puede comer en Vapiano?

Pues principalmente pasta y pizza, su genialidad no es qué se come (que está buenísimo) si no cómo se come. Los cocineros están en una barra en la que te pones a hacer fila (son bastante rápidos y en pocos minutos cada cliente sale de la fila con su plato en la mano) y seleccionas el tipo de pasta, la salsa y los condimentos que quieres, mientras ves como te lo preparan al instante.
Para las pizzas las dejas encargadas y te dejan una alarma que te avisa cuando está lista para que la vayas a recoger.
Otro punto que me encantó es que cada comensal tiene una tarjeta que cuando pide su comida a la cocina tiene que pasar y con la que luego a la salidas vas a caja a pagar ¡que ideal para reuniones de amigos o grupos y que cada uno se pague lo suyo sin problemas de tener que estar mirando y dividiendo cuentas!
Probamos un poco de cada, tanto las pastas como las pizzas, como los postres, fueron todo un éxito.

¿Qué comen los niños en Vapiano?

Tienes un menú infantil, ideal, con pizza/pasta y bebida por 5.50 además de que les dan un babero gigante con colores para pintarlo y les hace mucha ilusión ver como cocinan delante suyo.
Disponen de tronas y todas las facilidades para moverse dentro del restaurante con sillas o cochecitos.
Las dos doñas compartieron un menú infantil tan felices, con sus cosas y sus no aguantar en la trona más que lo justo. Por suerte es un lugar con el espacio suficiente para no molestar alrededor y en el que te sientes tranquila aunque sea con una teta fuera y la otra haciendo el payaso en el carro porque no tiene más hambre.
Todo y lo imposible de tomar una foto familiar decente, al final estos momentos son los más reales en nuestra maternidad, la mayor queriendo las cosas de la peque y la peque queriendo huir, siempre.

Nuestra experiencia en Vapiano

Lo que más nos ha gustado ha sido sin duda la amabilidad y el trato, la comida está buena, los precios de cada plato (pizza o pasta) van entre 9 a 12 euros, y las raciones son muy correctas.
Las niñas han estado genial y es una zona maravillosa para luego hacer planes en familia. Decir también que el espacio de arriba era la más familiar, y abajo se veía una zona mucho más tranquila, con ambientes a gusto de todos.
Sin duda un lugar al que volver, y que tener muy en cuenta para organizar una noche de cena (con o sin criaturas, que ojos, muy familiar pero por un día también me apetecería no ser yo la que tiene que comer a dos tiempos) o hacer una parada en nuestra siguiente visita al centro comercial, o al Museu Blau!

 

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